13 de febrero de 2011

Entrenamiento


Comiendo langosta

Tengo mentalidad de gordita. Toda la vida ha sido así y probablemente siempre lo será. Me encanta la comida, lo cual es probablemente una de las tantas cosas heredadas de mi papá. Por suerte nunca he sido una persona gorda. Evidentemente, tampoco es que he sido una flacuchenta; pero me considero una persona de contextura corporal normal (con épocas mucho más normales que otras).

Nunca he sido una persona especialmente activa y atleta. Dios sabe que lo he intentado, pues he participado en todo tipo de actividades deportivas durante toda mi vida. Como a los 8 años empecé a tomar clases de golf las cuales iban bien hasta que a mi papá se le ocurrió la brillante idea de comprarme palos de golf para zurdos. Tremendo error, porque si bien soy zurda, digamos que para el deporte soy más derecha. A partir de ese momento dejé el golf para siempre. Luego tuve una época en la que estuve en clases de natación tratando de ser parte del equipo del Campo Alegre en Caracas (por cierto, más sifrino imposible el colegio, ya que en esa época no tenía piscina y nos llevaban a las del del Valle Arriba Athletic Center). Eso funcionó probablemente no más de 1 mes, quizás porque nos mudaron a la India, pero lo más probable es que paré por aburrimiento. En Delhi tuve una época en que me metí en básket after school hasta que descubrí que no era lo suficientemente alta para practicar ése deporte.


Mi intento de fútbolista. Sabes cual soy?

Por supuesto, no pudo falta mi época de futbolista en la cual me metí en la liga mixta del colegio. Fui defensa de un equipo llamado Mithals y me pasaba los 90 minutos de juego hablando con la otra chama que era defensa mientras los muchachos trataban de hacer goles. No detuve ni un gol. Es más, me atrevo a decir que durante toda la liga probablemente no habré tocado la pelota más de 2 veces. Luego me mudé a Caracas y me metí en clases de tenis en las cuales no iba mal. Eso fue hasta el día en que un amigo del Peñón fue a verme y luego se burló tanto de mí y de lo mal que jugaba, que fue suficiente para salirme de las clases. Desde ése momento no había participado mucho en ningún otro deporte. Hace como 3 año participé en algún 10K el cual no tengo ni idea de cómo terminé, ya que no entrené nada, la noche anterior me comí una parrilla y la mañana del mini-maratón desayuné una arepa con queso telita.

El problema real debajo de todo esto es que he sido floja para el ejercicio. Si bien me he metido en gimnasios, la pereza me ha consumido y termino no volviendo más (y pagando por un servicio inútilmente). Afortunadamente todo eso cambió (espero que para siemre). Como todos los años, decidí que mi propósito para el 2011 sería ser más saludable. Más que estar en forma, para mi es importante estar sana y con buena salud. Investigué por internet y conseguí un programa de ejercicio llamado TurboFire. Afortunadamente me han funcionado y estoy súper motivada (por primera vez en mi vida).

Suena increíble decir que estoy en la cuarta semana del programa haciendo ejercicio 6 días a la semana (sí, dije seis) y comiendo sano (aproximadamente 1300 calorías diarias). Por primera vez llegué a un punto en el que me siento mal si dejo de hacer ejercicio 1 día ya que hasta ahora llevo 24 días sin fallar o dejar de ejercitarme. Sé que los resultados tardarán tiempo en verse, ya que con las dietas que había hecho hasta ahora de bajar 4 kilos en 1 semana terminaron debilitando mis músculos y volviendo mi cuerpo más débil. Afortunadamente estoy determinada en cumplir con mis 20 semanas de TurboFire y al final veré con qué continúo. Tampoco ha sido fácil cambiar mi mentalidad de no darle tanta importancia al peso como al porcentaje de grasa. Como mis músculos están creciendo, el peso más o menos se ha mantenido igual, pero he bajado ya casi en 5% mi porcentaje de grasa corporal, lo cual es increíble. He aprendido a comer sin dejar mi amor por la comida, pero apartando un poco esa mentalidad de gordita. Sé que puedo comer las cosas que me gustan en moderación y poniendo mucha atención a las porciones y a la hora en que lo consumo.

Terminando de hacer ejercicios

Siempre había pensado que sería imposible para mi ponerme en forma a éstas alturas de mi vida. Al fin me desperté y me dí cuenta de que nunca es tarde. Sólo tengo 26 años y ahora es que me queda tiempo para ponerme en forma. Sé que es un proceso lento y difícil, pero entiendo la importancia de tener resistencia y ser saludable. Estoy súper motivada y entusiasmada y sé que lo puedo lograr. En 20 semanas veo si subo fotos de antes y después (con suerte habrá una buena diferencia). Creo que es importante ponerle esa atención a nuestro cuerpo, pues inevitablemente siempre será parte de nosotros. Si ya no estás cuidando tu cuerpo y pensando en tu salud, te digo que todo es posible. Yo sé que apenas estoy comenzando, pero sé que lo puedo lograr. Tú también puedes hacerlo si le pones fuerza y voluntad. Te animas?

3 comentarios:

  1. que bioen que estas motivada, lo de te aminas suea a que estas vendiendo el programa hahahaha, cuentame de que se trata?

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  2. Adolfo
    Básicamente es un programa de videos de Kickboxing...6 dias a la semana durante 20 semanas...es decir, casi5 meses! super divertido...de pana deberían pagarme por venderles el producto! jaja
    para hombres hay algunos como P90X o Insanity..
    puedes conseguir mas informacion en www.teambeachbody.com :)

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  3. no has participado en carreras 10K en la capital ?

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